domingo, 16 de noviembre de 2014

Assassin's Creed: Rogue (Xbox 360)

Que el padre del entendimiento nos guíe.

La serie anual vuelve... y, en cierto modo muy puntual, lo hace con fuerza.

Hola de nuevo, Internet. Bueno, podemos empezar sin más dilación, supongo. Primero que nada, no es un secreto gubernamental que soy un fan de la serie Assassin's Creed, he jugado casi todos los títulos de la serie, incluyendo algunos portátiles. PERO, prometo ser lo más objetivo posible.

- ¿Debo repetirlo?
- Que te calles, joder.


Yo ho, haul together, hoist the colors high!

Bueno, en realidad ya no se trata de piratas, pero el elemento de los barcos que tanto se expandió e impuso en Assassin's Creed IV: Black Flag, vuelve con todo su brillo. Ahora bien, podemos remarcar algo muy simple, en ese sentido es casi lo mismo que AC IV. Veamos, esta sección se refiere al gameplay. Y nos encontramos frente a un título que vuelve a presentar a América como su escenario principal, la misma América que uno ya ha explorado a sus anchas cuando el protagonista era el Capitán Kenway. ¿Era necesario? Lo dudo. ¿Es entretenido? Si fuiste uno de los entusiastas de las luchas marítimas en el IV pues también lo serás aquí, supongo. Por mi parte, no pude llevarme a repetir la experiencia otra vez y casi pasé por alto las luchas en el mar, solo mejorando el barco para que no se hundiera fácilmente cuando la historia requiriese combate naval. Un par de nuevas armas en el barco, nuevos escenarios como los desiertos blancos de nieve al norte, la integración de las misiones de la flota de barcos que uno puede capturar, y no mucho más dejan al aspecto naval como casi lo mismo visto en el anterior título.

En tierra también podemos encontrar casi lo mismo. Las modificaciones más grandes fueron la integración de un rifle silencioso para el protagonista, que de paso tenía la función de lanza granadas para ciertos tipos especiales de munición. Después, y como el protagonista se pasa al bando de los templarios, están las fortalezas enemigas que ahora son nidos de bandas con asesinos incluidos. Y como en este respecto ahora hay enemigos que pueden ser tan sigilosos como uno mismo los desarrolladores decidieron que era una buena idea importar a la campaña la brújula tan conocida del modo multijugador de los anteriores títulos.

Para conquistar las fortalezas de las bandas tendrás objetivos específicos que deberás cumplir en el orden que desees.

Esto suena y se ve bien, otra vez.

Bueno, si nos referimos a los gráficos y al sonido del juego no hay mucho qué decir. Es exactamente lo mismo que el anterior título, ¿y acaso Black Flag se vio mal? Claro que no. Buenos mapas, buenos modelos de personajes, decentes texturas y efectos visuales tanto naturales como artificiales (Dentro de la medida posible para consolas de la generación ahora pasada) no veo forma de cómo criticar mal la juego. Claro, tal vez, si dices que no han hecho nada para mejorarlo, pero no es necesario intentar arreglar algo que no está roto, y mucho menos cuando las máquinas para las que fue creado ya no dan más de sí. En cuanto al audio, se trata de un juego de Assassin's Creed. Los juegos de AC siempre tienen una banda sonora excelente (salvo casos como alguno que otro portátil) y el doblaje al español es igual de decente que siempre.


Poner la Paz, por encima de la Libertad.

Dejé el punto más importante para el final. Esta es la historia: SPOILER ALERT.

El proyecto del Animus sigue en pie en Abstergo Entertainment tras el fracaso ocurrido con la muestra 17. Ahora se enfocan en seguir el rastro de una línea de memoria genética que nos lleva a la vida de un Assassin que vivió en la época de la colonización. Su nombre fue Shay Patrick Cormac y es importante para el proyecto porque durante su juventud sus ideas alrededor de la hermandad fueron cambiando. Hasta que finalmente decidió que lo que hacían los asesinos de esa época estaba lleno de errores catastróficos. Y con ello en mente abandona la hermandad, solo para que poco a poco y casi como parte del destino llegué a los brazos de la Orden Templaria.

Del lado de sus anteriores peores enemigos ahora luchará para detener los intentos de los asesinos por encontrar más artefactos de los precursores y darles mal uso. Gradualmente y utilizando todo lo aprendido en su tiempo con la hermandad se convertirá en el principal participante de la gran purga americana que se llevó a cabo durante la guerra de los 7 años, prácticamente destruyendo la hermandad de los asesinos con la ayuda del Gran Maestre Templario Haytham Kenway.

Para después seguir con su trabajo de buscar los artefactos precursores por el mundo, una tarea que podría llevarle por cumplir el resto de su vida. Hasta que en 1776 todos los rastros lo llevaron a Francia, donde se encontraría con el asesino que tenía una pieza muy importante en sus manos. Con la fuerza de la experiencia y su sabiduría construida a través de los años como cazador de asesinos, Shay no tuvo muchos problemas en asesinar a Charles Dorian, y seguir con su camino.


El templario del rito americano, en una precuela que funciona de verdad.

Bueno, si bien por todo lo demás el juego es prácticamente lo mismo que las anteriores entregas, lo que destaca con creces es la historia en Assassin's Creed: Rogue. La historia y su personaje, pues Shay pasa por una curva de aprendizaje y maduración por la que casi no existió en Connor, y por la que apenas pasó Edward. Además tiene la personalidad suficiente para caer bien al público, siendo un personaje no tan seco como Connor y no tan ligero y despreocupado como Edward. Por primera vez tenemos una historia que pone todo del lado de los templarios, tanto dentro como fuera del Animus, con datos interesantes sobre el mundo en el que se desenvuelve la historia de los títulos y profundizando a la vez que ampliando otros detalles más. 


¿Saben quién era un personaje mucho más interesante y ameno que los protagonistas de AC III y IV? Ajá, Haytham Kenway, y gracias a esta magnífica precuela podemos tener a dos personajes increíblemente carismáticos trabajando juntos para destruir a los asesinos.

¿Qué más puedo decir, Internet? No es agradable que sea un AC IV con un par de cambios y un nuevo protagonista. Pero es hermoso que la historia compense todo ese aspecto. Personajes interesantes, trasfondos que se hacen más y más complejos y variados, una historia que de hecho FUNCIONA como precuela al saber usar los elementos tanto del III y el IV. Todo eso hacen a Assassin's Creed: Rogue, en mi humilde opinión personal, el mejor juego de la saga americana de Assassin's Creed. Un imperdible si eres fan de Assassin's Creed, sin duda alguna.

¿Tienes una opinión que puedas compartir? ¿Piensas todo lo contrario a lo que dije? Adelante, comenta y comparte tus ideas sobre el juego en cuestión, que siempre es bueno escuchar lo que todos piensan cuando se trata de una pasión compartida. 

Este ha sido Xybran, nos leemos pronto, Internet.

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